Ejercicios de automasaje facial
Para contrarrestar las mejillas flácidas: sonríe, con sonrisa amplia y calurosa, estirando todo lo que puedas la comisura de los labios hacia arriba. Repite 10 veces el ejercicio.
Para evitar las cejas caídas: con los dedos índices de las dos manos presiona justo encima de las cejas, y al mismo tiempo procura arquearlas durante alguno segundos. Ya verás que no puedes conseguirlo, pero esta es la gracia del ejercicio.
Par evitar los párpados caidos.
Parpado superior: con las puntas de los dedos presiona debajo de las cejas, arquéalas y mantén los ojos fuertemente cerrados durante algunos segundos; después relajalos lentamente.
Parpado inferior: con las yemas de los dedos debajo de los ojos, presiona con fuerza sobre el borde de los pómulos, más o menos 6 segundos; con los ojos y aumenta paulatinamente la presión. Relájate y abre los ojos.
Ejercicio de relajación: cirra los ojos y cúbrelos con la palma de la mano, sin presionar, unos 30 segundos. respira pausadamente y relájate.
Para atenuar las arrugas de la frente: con las yemas de los dedos presiona fuertemente sobre el nacimiento del pelo, y mira al suelo durante algunos segundos, pero con los ojos cerrados.
Otro ejercicio para pómulos: pon el borde de las manos sobre las mejillas y haz con los labios un mohín, como si fueras a pronunciar una (( O )) muy exagerada; luego relájate y sonríe.
Para fortalecer los tejidos de alrededor de la boca: durante unos segundos, sopla como si quieras hacer volar una pluma, abre la boca y estira los labios, apoyados sobre los dientes; relájate y sonríe.
Para atenuar arrugas en barbilla y cuello: siéntate en una silla con la espalda muy tiesa, echa la cabeza hacia atrás y adelanta la barbilla, montando el labio inferior sobre el superior, luego gira alternativamente la cabeza hacia la derecha, hacia adelante y hacia la izquierda.
Ejercicio para evitar la papada: bien erguida en una silla, echa la barbilla hacia arriba estirando los músculos todo lo que puedas, en esta posición, deja descansar la cabeza sobre la nuca unos segundos, y para terminar déjala caer de golpe hacia delante.
Para contrarrestar las mejillas flácidas: sonríe, con sonrisa amplia y calurosa, estirando todo lo que puedas la comisura de los labios hacia arriba. Repite 10 veces el ejercicio.
Para evitar las cejas caídas: con los dedos índices de las dos manos presiona justo encima de las cejas, y al mismo tiempo procura arquearlas durante alguno segundos. Ya verás que no puedes conseguirlo, pero esta es la gracia del ejercicio.
Par evitar los párpados caidos.
Parpado superior: con las puntas de los dedos presiona debajo de las cejas, arquéalas y mantén los ojos fuertemente cerrados durante algunos segundos; después relajalos lentamente.
Parpado inferior: con las yemas de los dedos debajo de los ojos, presiona con fuerza sobre el borde de los pómulos, más o menos 6 segundos; con los ojos y aumenta paulatinamente la presión. Relájate y abre los ojos.
Ejercicio de relajación: cirra los ojos y cúbrelos con la palma de la mano, sin presionar, unos 30 segundos. respira pausadamente y relájate.
Para atenuar las arrugas de la frente: con las yemas de los dedos presiona fuertemente sobre el nacimiento del pelo, y mira al suelo durante algunos segundos, pero con los ojos cerrados.
Otro ejercicio para pómulos: pon el borde de las manos sobre las mejillas y haz con los labios un mohín, como si fueras a pronunciar una (( O )) muy exagerada; luego relájate y sonríe.
Para fortalecer los tejidos de alrededor de la boca: durante unos segundos, sopla como si quieras hacer volar una pluma, abre la boca y estira los labios, apoyados sobre los dientes; relájate y sonríe.
Para atenuar arrugas en barbilla y cuello: siéntate en una silla con la espalda muy tiesa, echa la cabeza hacia atrás y adelanta la barbilla, montando el labio inferior sobre el superior, luego gira alternativamente la cabeza hacia la derecha, hacia adelante y hacia la izquierda.
Ejercicio para evitar la papada: bien erguida en una silla, echa la barbilla hacia arriba estirando los músculos todo lo que puedas, en esta posición, deja descansar la cabeza sobre la nuca unos segundos, y para terminar déjala caer de golpe hacia delante.
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